Clase de historia

Por: Diego Kraljev

Era previsible no?... La gente está cansada de soberbias y agresiones. No se puede pedir cicatrizar las heridas del pasado si quien lo pedía nos hacia recordar, en carne propia, cuales habían sido sus pasatiempos montos post adolescentes. Y con su retórica y verborragia levantaba la voz como los sargentos para dar órdenes. Fue bueno saber que los sabios no necesitan meterse en ese juego de ansiedades. Los sabios necesitan actuar bajo razón y eso hizo Binner. Con su tranquilidad le movió las piezas del tablero electoral hasta llevarlo a un Jaque Mate de 200 mil votos a favor. Por que en sí fue un Jaque Mate. Bielsa hoy ya no es candidato a nada y suma otro ex a la larga lista de segundos puestos que acumula en su “ex” tensa historia. El ahora ex diputado se jugó en contra. Jugó un partido donde pateaba y la pelota volvía. Escupía y le pegaba en la cara. Fue de caballero reconocer la derrota aunque sus palabras sonaban casi “poéticamente” estudiadas. Claro, la realidad decía que él perdió una elección, pero la letra chica también decía que había llevado a el peronismo, a Kirchner a Obeid y tal vez a Cristina a lo más bajo del cadalso. Perdió y puso la cabeza de todos bajo el hacha del verdugo voto socialista y más en una región difícil y rica en todo. Bielsa fue un candidato oportunista, puesto a dedo y que le permitió a Binner proyectarse terriblemente como una figura potente a nivel nacional. Ahora es visto con otros ojos. Y Bielsa, mientras tanto, creo el mundo de las contradicciones donde ahora va a renunciar a su banca de diputado una vez que perdió la elección en nuestra provincia. Pero gracias a los bemoles, dimes y diretes de la política Argentina, también podemos preguntarnos (siempre en el juego de las contradicciones) qué hacia un diputado porteño peleando por la gobernación en Santa Fe? Además que renuncie o no, no le hace mérito a su palabra. Cuando iba a ser enviado como embajador a Paris también había perjurado dejar la banca. Pero obvio, no lo hizo. Ahora sale por todos los medios a decir que va a trabajar con el sudor de su frente y no con el sudor del estado por que “no tiene para vivir” (si él no tiene para vivir que le queda al pochoclero de la peatonal)... Pero son cosas del destino... Y estabas avisado. Bielsa fue un instrumento que nos costó millones a todos. Ya lo dijo Binner” Se repartió mucha plata para las campañas” y eso no se recupera. Es como la moral, una vez que la perdiste... No la recuperás más... Por más que sonrías en cualquier afiche. Ahora vienen tiempos de cambios y Rosario va por más. Por que obviamente la frase sirve para cualquiera. Fue histórico lo realizado por el socialismo. Y más allá de la bandera con la que uno encare la vida un hecho que genera historia sirve y gratifica a todos. En 103 años de historia Binner, Lifschitz y compañía lograron el sueño postergado. Y a todos les tembló el corazón cuando, al fin y al cabo, Bielsa reconoció la derrota. La sensación vivida en el Bunker socialista fue parecida al gol de Burruchaga a los alemanes. Ese que le daba el título del mejor de todos, del campeón a los muchachos del partido. Es historia y lo será. Y así como muchos pudieron vivir la historia pasada, ahora hay una que forma un presente y comienza a gobernar a partir del 10 de diciembre. Esta historia se escribió en el 2007, en la era tecnológica, de todo los super. La historia que empieza a escribir el socialismo en Santa Fe y quizás dentro de unos años a nivel nacional. Y dentro de lo histórico también está el triunfo de Lifschitz por casi 58 puntos. Fue el hombre más votado en la historia de los intendentes de la ciudad. Y allá va Bielsa, repartiendo tarjetitas con su nombre. Proponiendo secundar a Kirchener en lo que este necesite o volviéndo a su antigua profesión de... Abogado para ganarse el mango. Una vez nos preguntamos qué iba a ser de Bielsa si perdía la provincia. Obviamente pensamos que no volvería por otros 20 años, como lo había hecho hasta ahora. Sólo quedará la bella María Eugenia en el Concejo... Quizás la única ganadora de toda esta elección. La mirada del pueblo cambió, maduró. Supo votar y mantener las ideas que llevaba al votar. Para crecer no hace falta un choripan o un plan jefes y jefas. Para crecer hay que construir. Y hoy el santafesino aprendió a construir su propia provincia.