El gran seductor

El Frente Progresista fue el gran seductor en estas elecciones pasadas. Más de 850 mil personas depositaron su confianza, por cuatro años, al ex Intendente de Rosario, Hermes Binner. El 10 de Diciembre asume.

Por Diego Kraljev

El pingüino mayor, sin dudas, vivió un domingo que jamás querrá recordar. Se jugaban las gobernaciones en dos provincias clave, Santa Fe y Córdoba. Santa Fé con 24 años de peronismo enquistado y Córdoba un poco menos. Y al menos en nuestra provincia, y de la mano de Hermes Binner y Miguel Lifschitz sufrió un golpe no menos que histórico. Por primera vez en Argentina, un socialista llega a ocupar una Gobernación. Hermes Binner, dos veces Intendente de Rosario, aplastó categóricamente, a Rafael Bielsa por diferencia de 10 puntos: 48,56% frente al 38,84%. Esta victoria, sin embargo, tiene representaciones simbólicas más importantes. Significa la primera derrota del peronismo en una provincia que había sido su bastión, y en donde instituyó una Ley de Lemas, que impedía cualquier eventual derrota. Según esta Ley, los votos de los diferentes candidatos de un mismo partido político sumaban a quien más votos tuviera. Así, el Partido Justicialista, que agrupa a una diversidad corrientes, aseguraba una victoria año tras año. Cabe acotar que pese al costo político que hoy le puede quitar la cabeza a Jorge Obeid, apenas asumió como gobernador, en el 2003, cumplió con su promesa de derogar esta bendita ley. Y así lo hizo cumpliendo algo que, sin dudas, le produjo una erosión tan grande dentro del partido que terminaron perdiendo bastiones importantes dentro de la provincia. Abolida esta Ley, Binner logró derrotar a un candidato K que había recibido más que ningún otro el apoyo presidencial. Cinco veces vino a Santa Fe Néstor Kirchner (siempre acompañado por Cristina) a apoyar a Bielsa en sus actos públicos, salvo el último, en Sauce Viejo donde viajó solo. Quizás una señal de que Cristina no quería sacarse una foto al lado de un seguro perdedor. Las encuestas nacionales nunca tuvieron dudas. Las cosas no quedan ahí. El triunfo de Binner demuestra que una unidad de la oposición, que a escala nacional resulta imposible, pudiera significar una competencia por lo menos interesante en la carrera hacia la Casa Rosada, que se definirá el 28 de octubre próximo. Pero el Socialismo quiere seguir haciendo bien los deberes, prolijos como hasta ahora y de manera responsable. Saben, internamente que se han convertido en una fuerza nacional. En una fuerte fuerza nacional pero con proyección, quizás, para el 2011. Santa Fe y Córdoba son dos de las provincias más importantes de nuestro país pero, a pesar de todo, se sigue sosteniendo que “la que pone presidentes es la provincia de Buenos Aires”. ¿Altera en algo el panorama de las elecciones presidenciales? Según El reelecto Intendente de nuestra ciudad Miguel Lifschitz en un reportaje a MAS7, “No creo que nada eche sombras sobre Cristina Fernández”. Habrá que esperar un par de meses más para saberlo.