Camino a la perdición

Una significativa visita desde las islas británicas sería develadora de viejas y hasta ahora vergonzantes amistades políticas.

Por: Juancho Caminos

Siguen las visitas. Ha estado, y no por única vez, un selecto plantel del London Stock Exchange (LSE), o sea la Bolsa londinense. Un selecto plantel de ejecutivos de la Bolsa británica está desarrollando intensas gestiones de “captura” comercial, principalmente desde la ciudad de Buenos Aires. Están abocados a la pesca o simple “mejicaneada” de empresas argentinas o con sede en nuestro país para que elijan las ventajas de esa ronda europea de negocios. La feroz competencia comercial entre los principales grupos financieros desatada en el mundo, tiene su reflejo, entre otros, en las disputas “inter-bolsas” que ya están llegando a estas playas también. Por boca de uno de sus ejecutivos “estrella”, Grahan Dallas, LSE habría graficado las conveniencias de operar en la famosa “Milla Cuadrada”, en detrimento de la bolsa de New York, por ejemplo. Aclaremos, los poderosos grupos financieros regentean estas especies de “casinos” de los papeles “accionarios”. Pero no necesariamente son exclusivamente eso. Es más, hubo numerosas crisis bursátiles en el mundo que los contó como sus principales causantes y sin que ellos sufrieran el más mínimo rasguño. En general los damnificados son los millones de pequeños “inversores” que les gusta esa timba y que cada tanto alguien gana para darle una cierta “lógica” y “esperanza” al juego, igual que la ruleta. Quédense tranquilos, cuando los “chicos” ganan, los “grandes” ganan mucho más, y cuando los “chicos” pierden no necesariamente los grandes también. La “banca” nunca pierde, los “puntos”, si. Por ahora el mejor reclutamiento por parte de los británicos, es el Grupo Clarín que ya parte a Londres a cotizar en esa bolsa. Están “tentando” a uno de los empresarios exitosos del período Kirchner, Marcelo Mindlin a través de su Pampa Holding que ya esta cotizando en New York. No han sido reveladas las empresas visitadas por los ilustres financistas. Pero sus ejecutivos sí se animaron a exponer las ventajas comparativas con otras bolsas, principalmente la New York. El volumen de negocios de las empresas debutantes en Londres habría duplicado al de los Estados Unidos; ofrecen mayor eficiencia porque todas las operaciones son electrónicas y la perla: el centro de gravedad de las operaciones diarias se va desplazando de la costa este de EE.UU. hacia la capital inglesa y Hong Kong. Aseguran, además que el mercado de Londres es más global porque existen muchísimos inversores de Medio Oriente que hacen sus inversiones allí por razones políticas. Nos queda la impresión que esta gira también haría las veces de un cierto “blanqueo” político-económico de los principales “gerentes políticos” locales de los últimos treinta años. O quizás sean las urgencias y requerimientos de esta guerra comercial entre poderosos no declarada públicamente y no menos peligrosa por ello. Parece como que se estarían animando a decir, ya cansados de tanta actuación, “terminemos con esta farsa”.