Eramos tan pobres

Por la brecha que va creciendo entre el incremento de la demanda y el de la oferta interna, Argentina tiene cada día más pobres.

Según un estudio privado dado a conocer recientemente, ante el aumento en la brecha que existe entre la demanda y la oferta mínima, la tan temida inflación, escondida por el gobierno, empieza mostrar sus primeros síntomas; Generar más pobres. Según la empresa responsable de este informe privado que alertó sobre los desequilibrios que se están produciendo en la población, remarcó que la suba cotidiana de las variables del mercado impactan directamente sobre los indicadores sociales. "La inflación comienza a generar pobreza” señaló el estudio. Pero entre los problemas que resaltan este aumento de pobreza no sólo se encuentra al cuestionado INDEC como indicador, también hay que evaluar la crisis energética que sufrimos este invierno producto de las bajas temperaturas, el clima que además repercutió en las cosechas y sin dudas el factor más importante fue la aceleración del gasto público impulsado ferozmente, como política social, por Julio de Vido y sus “generosos” fideicomisos. Existen al menos dos tendencias que chocan en la realidad "La producción de bienes aporta cada vez menos al incremento de la oferta y el aumento de la absorción interna depende cada vez más del consumo y menos de la inversión", especificó el informe. Es necesario un poco de “cintura política” puesto que si el país no comienza ya a balancear la distribución el escenario se tornará difícil de manejar y más con la abrupta y diaria aceleración de los gastos públicos que es el que "define una política fiscal claramente expansiva y una política de ingresos sometida a presiones crecientes". Esta situación se genera, en simultáneo, con la consecuente suba en sus precios y también por caída en la oferta de productos esenciales como leche, tomate o papa, lo que se adjudicó a "problemas climáticos". Igualmente, y a pesar de esto, economía debería estar al tanto y evitar que la política monetaria Argentina trabaje en forma aislada. Por el contrario una alta solvencia fiscal sería la clave para que resulte efectivo.